El trascendido -conforme transcurren los días- va cobrando visos de realidad, por lo que resta únicamente esperar la orden de Casa Aguayo al Congreso del Estado para que inicie el trámite de remoción.

Se apunta que el tema de la –inminente- remoción del Auditor Superior del Estado, Francisco Romero Serrano, llevaría al estallido de un escándalo mayúsculo de corrupción, componendas y negocios bajo el “escudo” de las cuentas públicas de los ayuntamientos.

Se comenta también que está presuntamente involucrado un medio de comunicación.

Además, de una ex funcionaria del gabinete del gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta.

Y que la denuncia está radicada en la Unidad de Inteligencia Financiera, a cargo de Santiago Nieto Castillo.

Vaya trama.

Vaya manera de hacer negocios.

Vaya forma de corromper las instituciones.

“Fuentes” bien informadas revelaron a este espacio que la denuncia fue presentada por varios presidentes municipales ante la Unidad de Inteligencia Financiera en contra del Auditor Francisco Romero Serrano.

Ello derivado de la extorsión que están siendo objeto, pues como no contrataron a los “Auditores Externos” que les fueron sugeridos… sus cuentas públicas recibieron múltiples observaciones.

Lo que los llevó a tener que negociar.

Pero en la negociación los montos que les fueron solicitados eran desproporcionados.

Sobre todo, cuando el presupuesto ejercido está debidamente soportado con la programación y ejecución de obras.

Pero…

Eso no importa.

Menos interesa.

Ni tiene relevancia.

Lo que vale para el equipo de Romero Serrano… son los negocios.

Y las componendas.

Para ello, tiene su Despacho de Contadores en la colonia San Manuel.

Ahí está el búnker de Paco, como le dicen sus amigos.

Ahí se gestan las operaciones.

Y los acuerdos.

Claro, los negocios con su escuadrón de “Auditores Externos” que contrató.

Más la realidad lo alcanzó.

Y la gota que derramó el jarro es la denuncia ante el “Fiscal de Hierro” Santiago Nieto.

De ahí, que el asunto está siendo tratado con pinzas.

Por un lado están los hechos denunciados por alcaldes.

Y por el otro, la amistad que hay entre Miguel Barbosa y Santiago Nieto.

Misma que se plasmó en 2018 cuando

Barbosa Huerta contendió por la gubernatura

y perdió ante Martha Érika Alonso Hidalgo.

Ahí estuvo Nieto Castillo, apoyando y respaldando al entonces candidato de MORENA.

-Pues-, no debe olvidarse que antes de su designación Presidencial en la Unidad de Inteligencia Financiera, estuvo al frente de la Fiscalía Especializada para la Atención de los Delitos Electorales, adscrita en la PGR –hoy Fiscalía General de la República-, durante el sexenio de Enrique Peña Nieto.

LOS NEGOCIOS CON LA ALCALDESA

Tampoco debe soslayarse-menos olvidar- la encomienda “in péctore” que recibió…

“Auditar al Ayuntamiento de Claudia Rivera Vivanco”.

Licitaciones, obras, compras, contratos.

Todo.

Y todo era todo.

¿Qué pasó?

Que el Auditor Francisco Romero pactó, negoció y acordó con la alcaldesa.

Y nada pasó.

Nada sucedió.

Lo que llevó a recibir el mensaje… Pronto dejarás el despacho.

Algo pasó en el transcurso y Romero Serrano continuó al frente de la Auditoría Superior del Estado.

Más no contaba don Paco con la denuncia ante la Unidad de Inteligencia Financiera.

Solo resta esperar la forma en que ventilará su salida.

Porque dicen, que es un hecho su despedida.

¿Será…?

Al tiempo.