Si el inquilino de Palacio Nacional culpa al neoliberalismo como a la mafia del poder de todos los males que asolan a la nación, el huésped de Casa Aguayo lo hace con el Moreno-Galismo.
Solo que ambos mandatarios olvidan un pequeño detalle.
López Obrador entró al cuarto año de su Presidencia y Barbosa Huerta al tercer año de gobierno.
En el caso de Puebla, cómo entender la política de seguridad del titular del Ejecutivo Estatal si en 2 años y medio de administración lleva… CUATRO Secretarios de Seguridad.
Donde Él, y sólo Él, tiene la facultad para nombrar a su gabinete.
Y así lo hizo.
Y así lo hace.
Y así lo hará hasta término de gestión en 2024.
El 31 de julio de 2019, un día antes de rendir protesta, Luis Miguel Barbosa designó al Vicealmirante Idelfonso Amezága Ramírez al frente de la Secretaría de Seguridad Pública.
Únicamente duro el integrante de la Marina… seis meses en Puebla.
L
Al relevo llegó -febrero de 2020- Raciel López Salazar, ex Fiscal de Chiapas, quien fue cesado en febrero de 2021 al aflorar la corrupción de la panda de chiapanecos que incrustó en todas las áreas de seguridad, como en los reclusorios.
En abril de 2021 entró al relevo Rogelio López Maya y solo estuvo 8 meses al frente de la seguridad.
El caso del bebé Tadeo le explotó en pleno rostro al quedar al desnudo la terrible y brutal corrupción de directivos y jefes del penal de San Miguel.
Pero…
Resulta que Barbosa Huerta en abril de 2021 anunció “limpia total del reclusorio”.
Que se actuaría contra los funcionarios que habían levantado “un pueblito” en el patio de San Miguel con cuartos y televisión.
¿Y…?
Después de 10 meses del “pomposo anuncio” gubernamental, resulta que nada cambió.
La corrupción continuó rampante.
Y galopando sin freno alguno.
Con el agregado del espeluznante caso del bebé -tres meses de nacido- que ingreso muerto al Cereso y donde NADIE VIO NADA.
Hasta que apareció en un contenedor de basura.
Y que gracias a la denuncia que hizo la activista Saskia Niño de Rivera con el periodista Ciro Gómez Leyva -Grupo
Imagen- es como se conoció del caso a nivel nacional.
De no haberse dado a conocer la noticia, quizás el hecho permaneciera oculto.
BARBOSA NO DESCARTA
VENGANZA POLÍTICA
Con la designación de Daniel Cruz Luna -cuarto Secretario de Seguridad- al frente de la SSP, el mandatario afirmó que “toda la fuerza del estado en contra de los servidores públicos que permitieron que ocurriera el caso del bebé Tadeo”.
“No vamos a dejar de conocer los detalles de todo, se los digo, para quienes estén involucrados sepan que vamos tras ellos conññ% toda la fuerza del estado; estamos ofendidos en Puebla por lo que hicieron y tenemos que dar ejemplo de que en Puebla la ley se aplica y los monstruos y mentes retorcidas hay que extraerlas del estado”.
Remató:
“Para aquellos que especulan que tales grupos criminales son los que están queriendo hacer cosas como una venganza política… no se preocupen, vamos a investigar y definir todo.
“No van a desestabilizar a nuestro estado con hechos delictuosos. Con este gobierno se topan y vamos a seguir aplicando la ley con toda firmeza sin inventar hechos”.
Más la cruda realidad alcanzó al barbosismo.
Hace 10 meses señaló que se procedería contra Raciel López Salazar y el grupo de chiapanecos, y al corte de hoy nada se sabe, mucho menos que alguno de ellos haya sido procesado.
Hoy declara que “toda la fuerza del estado se aplicará contra los implicados en el caso del bebé Tadeo”
De ahí, que Roberto Ignacio Alonso, coordinador de Ciencias Políticas de la Ibero Puebla, apuntó –entrevista Reforma- que “los relevos en la Secretaría de Seguridad Pública reflejan poca seriedad y lejanía con la sociedad civil de un gobierno que recibió una crisis en seguridad”.
“Los constantes movimientos denotan el error de acudir a gente cercana o recomendada, sin tener claro el perfil.
“Entonces es un error nombrar a gente de cierto grupo político o recomendados que no cumplen el perfil para atender herencias críticas.
“También refleja lejanía con actores sociales, que a nivel local y nacional le podrían ser de ayuda”, concluye Ignacio Alonso.
¿Qué siga para Puebla y los poblanos?
Al tiempo